A veces solemos hacer cosas sin pensar en las consecuencias que éstas traen. Aguantamos con una sonrisa en la cara para disimular lo mal que estamos, pero en verdad queremos destrozar el mundo que ya se está desmoronando alrededor nuestro. Queremos tirar todo a la mierda y volar lejos de todo y de todos. Parece que hay rachas donde uno busca la perfección y encuentra exactamente lo contrario.
Estoy en uno de esos momentos, en que TODO me sale mal y no quiero ser yo.
miércoles, 30 de junio de 2010
lunes, 28 de junio de 2010
Ya se que estoy piantao, piantao
Las tardecitas de Buenos Aires tienen ese qué sé yo, ¿viste? Salís de tu casa, por Arenales. Lo de siempre: en la calle y en mi... Cuando, de repente, de atrás de ese árbol, se aparece él. Mezcla rara de penúltimo linyera y de primer polizonte en el viaje a Venus: medio melón en la cabeza, las rayas de la camisa pintadas en la piel, dos medias suelas clavadas en los pies, y una banderita de taxi libre levantada en cada mano. ¡Ja, ja! Parece que sólo yo lo veo. Porque él pasa entre la gente, y los maniquíes le guiñan; los semáforos le dan tres luces celestes, y las naranjas del frutero de la esquina le tiran azahares. Y así, medio bailando y medio volando, se saca el melón, me saluda, me regala una banderita, y me dice...
Ya sé que estoy piantao, piantao, piantao...No ves que va la luna rodando por Callao;
que un corso de astronautas y niños, con un vals, me baila alrededor... ¡Bailá! ¡Vení! ¡Volá!
Ya sé que estoy piantao, piantao, piantao...No ves que va la luna rodando por Callao;
que un corso de astronautas y niños, con un vals, me baila alrededor... ¡Bailá! ¡Vení! ¡Volá!
sábado, 19 de junio de 2010
Si tanto solo existiera un mundo feliz. ¿Cuál sería el precio que tendríamos que pagar para poseerlo?, ¿arriesgaríamos todo por un poco de felicidad o solamente nos conformaríamos con el intento de mundo con el que convivimos a diario? No sé hasta qué punto mi vida funciona a la perfección, y tampoco sé hasta qué punto quisiera una vida arreglada. Pero más allá de todo eso imaginemos que este supuesto mundo perfecto existiera, y en él se encuentran todas las cosas que deseamos, ¿le pondríamos empeño a vivir?, ¿conoceríamos realmente lo que es el esfuerzo de algo? Digo yo, ¿no tiene su encanto el hecho de vivir peligrosamente?, no sé ustedes, pero yo prefiero vivir en este imperfecto universo y equivócame para así aprender a no cometer los mismos errores. Sin embargo, soy de las que siempre tropiezan dos veces con la misma piedra.
martes, 15 de junio de 2010
Los hombres son inesperados, inentendibles e histericos. Quien no ha pensado eso que arroje la primera piedra-. Algunos se la dan de piratas y te vuelven loca con sus planteos existenciales de "Yo amo a la joda", otros en cambio, tardan en poner primera y arrancar. Bueno, a mi me ha tocado de las dos, aunque las dos son jodidas, la última me tiene superada. No puede ser que los hombres, los machos alfa de la sociedad, no se dignen a dar el primer paso, bueno, tambien convengamos que hay mujeres desesperadas que avanzan sin importarles nada, pero en este caso la moderación en la táctica de avance es la clave. Ser moderada en las veces que abris su ventana para hablarle, ser moderada en cúantos mensajes le mandas, en qué sentido y por último y no por eso menos importante, qué es lo que le mandas.
El quid de la cuestión es saber cúando parar, cuando desistir, aunque te duele dejarlo, no podes caer bajo. Por que lo único que falta es que te tache de necesitada y encima el te quiera para ser "solo amigos"
Nota importante: La dignidad se aplica con los hombres cuando queres que se den cuenta de esas pequeñas cosas tontas, que hacen sin darse cuenta, que nos lastiman.
Nota importante 2: el orgullo también se aplica con los hombres pero sólo cuando los tienes que matar en tu mente -
El quid de la cuestión es saber cúando parar, cuando desistir, aunque te duele dejarlo, no podes caer bajo. Por que lo único que falta es que te tache de necesitada y encima el te quiera para ser "solo amigos"
Nota importante: La dignidad se aplica con los hombres cuando queres que se den cuenta de esas pequeñas cosas tontas, que hacen sin darse cuenta, que nos lastiman.
Nota importante 2: el orgullo también se aplica con los hombres pero sólo cuando los tienes que matar en tu mente -
martes, 8 de junio de 2010
Resultaba ser que estaba con Dulcemelon fumando un cigarrillo, esperando que nuestra funcion, o mejor dicho, nuestra salida de sabado por la noche empiece, cuando fichamos a un flaco morocho de ojos verdes parado afuera muy cerca nuestro.
Como toda mujer, nosotras cuchicheando lo bueno que estaba, hablando de que lo partiamos en mil pedazos.
En eso se acerca hacia nosotras (Con Dulcemelon pensamos ilusamente que nos iba a venir a chamuyar) y tira un: - "Chicas, Blanco Encalada donde queda?"
Desesperadas las dos, le explicamos cómo debia hacer para llegar a su destino, el cuál estaba no muy lejos del nuestro.
Se da media vuelta y nosotras otra vez hablando de él.
Minutos más tarde cuando ya se hacía la hora de entrar, vemos a nuestro Principe Encantador con otras 5 chicas hablando muy amaneradamente.
Dulcemelon y yo nos miramos y lo dijimos todo: Qué desperdicio de hombre!!!!
Ahora sé por que se me hace tan dificil....
Como toda mujer, nosotras cuchicheando lo bueno que estaba, hablando de que lo partiamos en mil pedazos.
En eso se acerca hacia nosotras (Con Dulcemelon pensamos ilusamente que nos iba a venir a chamuyar) y tira un: - "Chicas, Blanco Encalada donde queda?"
Desesperadas las dos, le explicamos cómo debia hacer para llegar a su destino, el cuál estaba no muy lejos del nuestro.
Se da media vuelta y nosotras otra vez hablando de él.
Minutos más tarde cuando ya se hacía la hora de entrar, vemos a nuestro Principe Encantador con otras 5 chicas hablando muy amaneradamente.
Dulcemelon y yo nos miramos y lo dijimos todo: Qué desperdicio de hombre!!!!
Ahora sé por que se me hace tan dificil....
jueves, 3 de junio de 2010
Sé muy bien cúal es tu táctica. Me buscas, me coqueteas, me llenas la cabeza y después te vas. Y yo a la vez tan cansada de tu juego que no puedo resistirte, sos como una droga para mi. Me haces sentir como una fiera enjaulada sin poder hacer nada. Comiendome tu estúpido universo materialista, donde yo sería tu objeto más caro y más apreciado. Poniendo el cuerpo a la bala y la cabeza en el juego, donde pretendo ganar.
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